La comida es parte de expresión cultural de un país y es por eso que los platos más populares celebran algún día especial. Es lo que sucede con el Día del Barros Luco, un sándwich que se hace en base a pan de marraqueta u otro, carne de vacuno y queso. Básicamente con sólo tres ingredientes se ha convertido en un clásico y apetecido plato para los chilenos dada su versatilidad y contundencia: pan carne y queso.

Pero toda tradición tiene su historia y este sándwich no es la excepción, ya que su nombre hace alusión a los apellidos del presidente Ramón Barros Luco, que gobernó entre 1910-1915 y que acudía a la antigua cafetería Torres ubicada en Santiago, para disfrutar de una marraqueta con carne a la plancha y queso. Desde ahí que esta simple preparación se popularizó y se hizo un espacio dentro de los clásicos menús chilenos.

Respecto a su preparación, Álvaro Martínez de Doña Carne comenta que “el corte de vacuno perfecto para hacer un buen Barros Luco es el Asiento, Posta Rosada y Posta Negra, incluso hay quienes lo preparan con Filete o Lomo Liso, ya que es importante que la carne no tenga mucha grasa, porque es una cocción de poco tiempo, básicamente de vuelta y vuelta, entonces estos cortes son idóneos para esta preparación”.

Los expertos de Doña Carne comparten los principales tips para preparar el Barros Luco y celebrar su día con todo.

Ingredientes:

–       Pan marraqueta (también se puede optar por amasado, molde o frica)

–       200 gramos, o 2 bistecs de Posta Paleta

–       Queso mantecoso o gauda

–       1 cucharadita de aceite

–       Pimienta

–       Sal

Preparación:

●     Cortar la pieza de carne en filetes delgados o pedirle a su carnicero que lo haga.

●     En un sartén poner un poco de aceite a fuego medio y cuándo ya esté caliente poner los bistec y subir la intensidad del fuego. Sellar la carne por dos minutos por ambos lados, se pone sal y se cocina por otros dos minutos para finalizar sacando las piezas y poniendo el pan calentito en el sartén para que absorba todo el jugo, que es un puro sabor.

●     Aprovechando la temperatura del sartén, se funde el queso y cuándo ya esté derretido se apaga el fuego.

●     En una tabla, abrir la marraqueta en dos y poner los bistecs encima con todo el jugo disponible, luego agregar el queso y cerrar con la otra tapa del pan y ¡a disfrutar!

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